viernes, 24 de agosto de 2012

COMO DEBERIA SER EL SERVICIO DE AYUDA A DOMICILIO COMO BIEN SOCIAL

Creemos que ha llegado el momento de aclarar cómo se está desarrollando el servicio de ayuda a domicilio, tanto desde las instituciones públicas, como desde las empresas privadas, a través de la visión de una auxiliar domiciliaria, como profesional y como ciudadana.

Como profesionales, y teniendo en cuenta toda nuestra trayectoria, consideramos que nuestra labor es indispensable, pero poca ayuda podemos dar a nuestros usuarios, si no existe una cadena muy unida, entre asistentas sociales y familia.

Observareis que hemos dejado de lado a las empresas privadas que son contratadas por las instituciones públicas, y eso es debido a que no podremos echarles mano mientras dichas instituciones públicas no les paren los pies. 

Un servicio real de ayuda a domicilio no puede JAMAS ser realizado bajo "EL  ANIMO DE LUCRO", aun cuando sabemos que el 90% de los gastos de las empresas privadas pertenece a gastos de personal. Las instituciones tienen la obligación de hacer un VERDADERO SEGUIMIENTO, y no limitarse a cumplir con un pliego de condiciones.

Por tanto, el Servicio de Ayuda a Domicilio no debe ser concedido a las empresas privadas como un negocio, sino como una LABOR SOCIAL.

Cuando se solicita y/o se ofrece este servicio, es PORQUE ES NECESARIO, pero no nos olvidemos de que realmente es un servicio de copago, ya que se sostiene con los impuestos de todos los ciudadanos, a través de las instituciones públicas, y de lo que le corresponda pagar al propio usuario.

Partiendo de esa base, el servicio de ayuda a domicilio se concede para un fin único.

El Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD) es una prestación básica del Sistema de Servicios Sociales. Tiene por objeto proporcionar en el domicilio de las personas que lo precisen, una serie de atenciones de carácter doméstico, social, psicológico y rehabilitador.
El Servicio de Ayuda a Domicilio se fundamenta en procurar la máxima autonomía y permanencia de las personas en su domicilio para no desvincularla de su entorno socioafectivo. Para conseguirlo cuenta con personal cualificado y un sistema de seguimiento de cada uno de los casos, lo que permite maximizar la calidad del servicio prestado.

 Pues bien, este seguimiento no es real en la mayoría de los casos.

Se contrata el servicio para efectuar unas funciones, que luego no corresponden con la realidad.

Las empresas privadas conscientes de ello, no meten mano en el sistema, porque realmente están para ganar, y cuantos mas servicios existan, sean necesarios o no, más reciben en sus arcas.

Los usuarios y/o familiares que acceden al servicio de ayuda a domicilio no son conscientes de la realidad del mismo, y lo utilizan, en muchas ocasiones, de forma que en ningún caso ha sido concedido. 

La labor de una auxiliar domiciliaria es amplia, pero se basa exclusivamente en las tareas que son encomendadas para cada usuario, pero no somos el comodín de nadie. Es decir, si es un sistema de copago, todas las partes tenemos que ser conscientes de que ES UN SERVICIO DE LUJO, que resulta CARO, porque trabajan profesionales que deben ser tratadas y pagadas como personas cualificadas, y lo hacen individualmente en el propio entorno familiar, y por consiguiente, no es un trabajo ajeno perteneciente a la contratación directa. 

HAY UNAS NORMAS QUE CUMPLIR.

1.- El servicio tiene que concederse para personas que realmente lo necesiten
2.- El servicio tiene que ser realizado por profesionales, las cuales deben estar amparadas directamente por los servicios sociales, bajo la supervisión de las empresas privadas (ya que no queda más remedio).
3.- El servicio debe reunir las ayudas técnicas necesarias para prevención de riesgos laborales de las trabajadoras.
4.- El servicio es UN COMPLEMENTO de la labor que ejercita el cuidador principal, no profesional, pero es PROFESIONAL, y debe ser elaborado conjuntamente con los servicios sanitarios.
5.- En cuanto al servicio meramente llamado de tareas domésticas, DEBE SER MUY RESPETADO, y no ser considerado como la profesión de empleadas de hogar, tan ninguneada a lo largo de los tiempos.

Gran error por parte de las empresas, por no formar a sus profesionales continuamente.
Gran error por parte de las instituciones públicas, por no hacer un seguimiento continuo a las empresas privadas.
Gran error por parte de los usuarios y familiares, por no seguir las normas establecidas en el servicio de ayuda a domicilio.

Y TODOS ESTOS ERRORES, SE PAGAN SANCIONANDO Y DESPIDIENDO A LAS TRABAJADORAS DEL SERVICIO DE AYUDA A DOMICILIO.

QUE TAL SI LO SOLUCIONAMOS ENTRE TODAS LAS PARTES, PARA NO PERJUDICAR COMO SIEMPRE AL MAS DEBIL?

QUE TAL SI NOS COMPORTAMOS TODAS LAS PARTES DE FORMA DIFERENTE A LO QUE HEMOS APRENDIDO DE NUESTROS GOBERNANTES?

EL FRAUDE FISCAL LO CONOCEMOS. 

CONOCEMOS EL FRAUDE SOCIAL? LA LEY DE DEPENDENCIA ES CLARA.

SEAMOS CONSCIENTES DE QUE UN SERVICIO DE CALIDAD COMO LA AYUDA A DOMICILIO ES CARO, PORQUE ES DE LUJO, PERO ES MUCHO MAS BARATO QUE UNA RESIDENCIA GERIATRICA. ES MUCHO MAS HUMANO, PORQUE RESPETA NUESTRA INTIMIDAD PERSONAL Y FAMILIAR, DENTRO DE NUESTRO DOMICILIO.

Las trabajadoras del servicio de ayuda a domicilio denunciamos los abusos que sufrimos por todas las partes concernientes, ya que en los últimos años se toman en cuenta más las quejas de los usuarios que las que hacemos las profesionales día a día.

Se nos acusa de ladronas, de no ser puntuales, de no dar el servicio como quieren ellos, y no como está establecido. En resumen, las trabajadoras trabajamos más en un sistema policial que lo que establece la Ley de Dependencia.

Y finalizo diciendo que HAY QUE DEJAR MUY CLARO, que la plantilla  del Servicio de Ayuda a Domicilio está compuesta por trabajadores de todas las razas,  por hombres y mujeres, mayoritariamente, y que no debemos ser objeto de caprichos y/o cuestiones de "costumbres personales" para poder acceder a efectuar nuestro trabajo en el domicilio de cada uno de los usuarios. 

Estamos cansados de escuchar:

"No me manden a tal persona, porque es extranjera, o porque es de raza negra"
" No me manden a tal hombre, porque no estoy acostumbrada a que haga las tareas domésticas o me asee un hombre"
" No me limpias como lo hice yo cuando me encontraba bien"
" Tienes que hacer lo que yo te digo o sino me quejaré de ti a la asistenta social"

Cuando vamos a los hospitales, no tenemos esta opción. PUES TAMBIEN FALTA LIMAR ESTA CIRCUNSTANCIA.

Es terriblemente difícil trabajar en un domicilio particular, porque debemos respetar sus usos y costumbres. Y es mucho más difícil DEMOSTRAR NUESTRA PROFESIONALIDAD, ya que no tenemos testigos presenciales que atestiguen la realidad de cada caso y circunstancia.

Desde este blog SOLICITAMOS A LAS INSTITUCIONES PUBLICAS den una VUELTA DE 180 GRADOS al SERVICIO DE AYUDA A DOMICILIO, para que el mismo SEA REALMENTE UN SERVICIO NECESARIO Y DE CALIDAD.











viernes, 10 de agosto de 2012

NO ES NO

http://www.noticiasdegipuzkoa.com/2012/08/10/vecinos/donostia/babosear-no-es-ligar

La concejala de Igualdad, Naiara Sampedro, ayer, durante su comparecencia.