¿Quién cuida al cuidador?
EL AYUNTAMIENTO ELABORA UN INFORME SOBRE LOS CUIDADORES DE DEPENDIENTES EN DONOSTIA
DONOSTIA, CRISTINA TAPIA - Sábado, 8 de Septiembre de 2012 - Actualizado a las 05:24h
Una mujer cuida de una señora en silla de ruedas. (Foto: iban aguinaga)
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QUE las mujeres son las que se ocupan en mayor medida de cuidar a las personas dependientes del entorno familiar no es ninguna novedad. Tampoco lo es que su trabajo no está todo lo reconocido que debiera y que son personas que se entregan los 365 días del año a una labor que la mayor parte de las veces pasa desapercibida.
Todos estos aspectos y alguno más ha sido analizado en un trabajo que ha elaborado la empresa Oreka y que ha sido promovido por los departamentos de Igualdad y Bienestar Social. El informe ofrece una fotografía de la situación de los cuidadores en Donostia al tiempo que aporta varias recomendaciones.
En la capital guipuzcoana hay, en estos momentos, más de 8.000 personas que se dedican a cuidar a sus familiares y que obtienen la Prestación Económica por Cuidados en el Entorno (PECE) -a estos habría que añadir quienes reciben otro tipo de ayudas y a los que no perciben nada-. La mayor parte (ronda el 80%) son mujeres de más de 55 años que cuidan a sus padres o maridos. Según se desprende del documento denominado Diagnóstico sobre los cuidados a personas en situación de dependencia en Donostia (principales resultados y recomendaciones), más del 70% de las cuidadoras dedican más de diez horas al día durante la semana a atender a sus familiares. Una cuarta parte de ellas no recibe ningún tipo de ayuda por parte de otro familiar y el 25% reconoce haber tenido que reducir el tiempo de ocio o vacaciones. Como consecuencia de su labor, 45 de las 100 mujeres cuidadores preguntadas afirman tener estrés o ansiedad; 32, cansancio general; 25, problemas musculares; y 23, depresión.
ALTERNATIVA
Más servicios
Asimismo, preguntadas por cómo desearían afrontar su vejez, más del 44% prefiere una alternativa que no implique que sean cuidadas por un familiar. En opinión de Dominique Saillard, representante de la consultura Oreka, esto significa que "no quieren para sus hijas lo que ahora tienen ellas". Además, puso el acento en que en el futuro se va a producir un cambio y se demandarán más servicios a la administración ya que las mujeres se han incorporado al mundo laboral "y no están dispuestas a asumir esta labor".
En este sentido, la concejala de Igualdad, Naiara Sampedro, reivindicó el papel de estas mujeres. "El cuidado de las personas no se contabiliza, ni la riqueza que crean, ni el dinero que le ahorran al Estado", dijo. Por su parte, el edil de Bienestar Social, Jon Albizu, señaló que el Gobierno municipal tratará en "la medida de las posibilidades atajar esta situación ya que esta cuestión es para el Ejecutivo una prioridad".
El Ayuntamiento lanzará en otoño una campaña de sensibilización y organizará talleres, cursos y conferencias alrededor de estos temas.
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